sábado, 25 de enero de 2014

Mi amigo nocturno.

Tengo un amigo especial. El me acompaña por las noches. Debe ser que le caigo bien, porque cuando viene le cuesta irse. Hay épocas en que todas y cada una de las noches me acompaña hasta altas horas de la madrugada. Otras se deja ir. No me llama. Ni tengo noticias suyas. Pero en los días en que está conmigo... damos vueltas y vueltas como si bailáramos el más dulce de los vals. En la cama. Por la casa. Subimos y bajamos las escaleras. Leemos juntos. Navegamos por internet. Tejemos. Y ahí sigue. Esforzándose por poner resortitos en mis párpados para que sigan abiertos un minuto tras otro.
Yo repito el mantra de mi padre para las visitas pesadas. Aquel que dice "bueno, pues vamos a irnos que esta gente se querrá acostar". Pero hace oídos sordos. Como si la historia no fuera con él. Le preparo leche calentita con miel. Una infusión de rooibos. Nada.
Malo no es que venga. Malo es que no se quiera ir. Teniendo en cuenta que mi despertador suena todos los días a las seis. Pero peor aún es como hoy, que a pesar de que estuvo conmigo hasta las dos (y la noche anterior hasta las cuatro), hoy SABADO me ha tocado en la puerta de los sueños a las cinco. Ni soñar le dejan a uno. Hace frío. Bajo las mantas huele a calor. Cuando él no está, miro el reloj y por dentro sonrío pensando que voy a ronronear bajo las sábanas un par de horas más. Me duermo. Me despierto. Me vuelvo a dormir. Si está todo cambia. La cabeza se pone a desvariar. Da vueltas. Valora y revalora todas las acciones de mi banca personal. Las pone en alza. Las tira por los suelos. Como el más perfecto de los broker.
Me he convertido en fiel seguidora de El Larguero. Iker Jiménez me supera, pero hasta me cae bien Manolo Molés. Y Macarena Berlín... es casi como si fuera de la familia.
Me recomiendan que intente quitármelo de encima con flores de Bach o directamente con artillería pesada. Que le de Valium o Tranquimazin. Pero... ay... no puedo hacer eso. Que gano con sedarlo? Seguiría estando ahí, camuflado, pero latente. Es como si sacara el garrote vil e intentara aniquilalo sin tener un juicio justo.
En el trabajo, los amigos, la familia,... siempre hay alguien que no entiende cómo es que no pongo fin de forma drástica a esta situación, recurriendo por ejemplo, a un especialista en la materia. Incluso, hace unos meses, en el cole de Jorge, una mamá encantadora que me estaba escuchando hablar de mi acompañante nocturno me dijo que ella era coach y que podía ayudarme a ser consciente de cual era ElProblema para así asumirlo y que dejara de darme la lata. La cuestión es que yo sé cuál es ElProblema. Soy lo suficientemente introspectiva como para coger una linterna y mirar en qué punto está fallando la maquinaria. Y sé las razones intrínsecas que lo llevan a estar ahí, a mi vera. Y también sé porqué justamente ahora, cuando parecía que me estaba dando una tregua, ha vuelto.
Y lo peor es que soy plenamente consciente de que durante un tiempo, no se va a ir. 

Faroles


10 comentarios:

Aránzazu PG dijo...

Te entiendo tan bien.... es como haber leído lo que siento, lo que me pasa....
No se me ocurre que decirte, salvo que paciencia; no hay remedio milagroso, lo sabemos... solo esperar que marche y no vuelva por una larga temporada....
Un abrazo fuerte, fuerte
Pd- te escribí un mail hace unas semanas

violetazul dijo...

A mí hoy también me acompaña, aunque la culpa la he tenido yo, que lo he llamado con una taza de té de jazmín... Estaba tan rico...
Bueno, las que conocemos a este amiguete, sabemos que viene y que se va.. solo hay que tener paciencia.. en algún momento la maquinaria volverá a funcionar engrasada, y no tendrás compañía.
Besos guapi!

Anónimo dijo...

Pibaa, dulces... andares, sexis... abrazos y prontas... complicidades. Besitos

Chitin dijo...

Me estás preocupando...no tienes apetito...tienes insomnio...nena! cuidate!!! q tienes al pequeño J. q necesita a su mami en perfecto estado de revista!!!

Un abrazo!

Vane dijo...

Una cosa te digo, el insomnio te tiene poética perdida, me encanta! qué forma más bonita de expresarte tienes últimamente. Bueno siempre, pero ahora la sensibilidad aflora por todos tus poros y eso es bueno.
Ahora te cuento una cosita que te puede ayudar ;-)

Vane dijo...

Ya está, enviado a tu gmail!!!

bailadora dijo...

Ánimo corazón! Tienes mi compañía en las noches, por las ondas, ya lo sabes!

Anónimo dijo...

Te sigo, en silencio, desde hace 4 años, desde que nacio mi niño y al poco de nacer el tuyo, me sentí identificada contigo. Con tus andanzas has puesto una sonrisa en mis labios y una lagrima en mi mejilla en ocasiones. Tantos meses sin saber de ti...y era porque no estabas bien. Desde mi silencio interrumpido te mando un achuchon cariñoso y anonimo para que te recuperes pronto. Un beso para ti y tu pescadito.

Adijirja dijo...

Anónimo... Gracias por estar por aquí tanto tiempo y por esas palabras. No te vayas. Yo también procuraré no irme...

Sonia dijo...

Hola Adijirja. Soy Sonia, del blog "La calle de la abuela".
Te he dejado un premio allí. Por si quieres pasar a recogerlo www.lacalledelaabuela.blogspot.com

Espero que te anime un poco. Un besote