jueves, 2 de noviembre de 2017

Mesa de estación: otoño (Nature table: autumn)

Y llegó el otoño. Debería decir algo así como... dando frescor a los días cálidos del verano... 
Pero mentiría. Este ha sido uno de los otoños más calurosos que recuerdo. 30º marcaban los termómetros este fin de semana (ya en casi casi noviembre). Y como uno nunca está conforme con lo que tiene, lo que estoy es loca por calzarme los zapatos de invierno y usar mis chales y dedicarme sin tapujos a tejer como una posesa mientras tomo una taza de té humeante.  
Mientras esos momentos de felicidad plena llegan, nos conformamos con ir poniendo la mesa de estación.
El otoño arranca con el cumpleaños de Jorge, así que es nuestra estación favorita. No podría ser de otro modo. De modo que ésta, es nuestra mesa preferida. Evidente.
Por su cumpleaños, Jorge siempre le pide a su padre que le haga algo en particular. Con lo que cada año vamos añadiendo detalles. La mesa de estación de otoño creo que fue el regalo de su cuarto cumpleaños. El año pasado le pidió a su papá que le fabricara una casita de hadas y, este año, una mesa con sus sillitas. El papá se carga de creatividad y acaba elaborando cosas tan chulas como estas.
He de decir que las hadas no creaciones son mías. Son del taller de mi amiga Nuria (que por cierto, recibe encargos y hace cosas preciosas). Y el caballo fue un regalo de cumpleaños de un amigo de Jorge de su escuela de infantil, hecho por su mamá.  
Eso sí, evidentemente, todo lo tejido ha salido de mis agujas.
Estamos muy contentos con su llegada, Sr. Otoño. Pero, por favor, instálese de una vez... 




La historia que queremos contar es la de los preparativos para la llegada del otoño. Los enanitos vigilantes de la cosecha controlan que todo vaya bien y que los frutos otoñales salgan en su justo momento. Champiñones, setas, calabaza, maíz, peras y uvas. 



Mientras, los animales pequeños se aprovisionan de frutos (las bellotas, muy poco comunes en las Islas Canarias, vinieron camufladas en la maleta el año pasado desde Budapest)




Y a cierta distancia, el hada y la dama del otoño van marcando las pautas y los tiempos. Daos prisa!! Que ya se acerca el Señor Invierno!!! Y todo tiene que estar listo!!!


 

3 comentarios:

albis dijo...

Aix, qué bonitez!! Esos detalles son una locura, me encanta vuestra mesa!

violetazul dijo...

Esta mesa lo mola todo!!!
Me imagino a Jorge la de horas que debe pasar recreando miles de escenas y aventuras otoñales.
Parece que va llegando el fresco, y las agujas empiezan a llamarnos a todas horas :)

Isa dijo...

Estoy alucinando con cada detalle...esto solo podria salir de rus manos