domingo, 16 de marzo de 2008

Desde Peumayen

Recuerdo perfectamente el momento en que lo conocí. Estaba en quinto año de carrera. En la escalera que conducía a las salas de la biblioteca del Campus Central. Era tiempo de exámenes y había que llegar cerca de una hora antes de que abrieran y ponerse diligentemente a hacer cola. De otro modo era del todo imposible conseguir un sitio. Fue en ese contexto donde escuché su voz por primera vez. Aunque no supe quien era hasta unos días después.

Llegó en el momento justo. Probablemente el año anterior no habría dejado tanta huella y al año siguiente tampoco. Por aquella época la universidad ya había hecho la suficiente mella en mí y me había poblado la cabeza con ideologías políticas. Con filosofías alternativas. Empezaba a entender el mundo. A preguntar el porqué de las cosas. Se había abierto una brecha entre mi historia anterior y la visión que tenía en ese momento de la vida. Mi novio me dijo un día que en nuestra relación el problema radicaba en que nuestros objetivos en la vida habían madurado por caminos diferentes: yo quería ir a plantar florecitas al campo y él hacerse rico. Lo dejamos, claro.

Empecé a asistir a salas de teatro, a ver cine alternativo, a vestir de otra manera. Retomé las ganas de leer por puro placer. Supongo que empecé a hacer el mundo más mío y no a seguir dócilmente lo que esperaban los otros de mi.

Y fue en ese caldo de cultivo en perfecta ebullición cuando aquel día llegó su voz.

No paré hasta saber quién era. Se trataba de un estudiante de Físicas que había dejado la carrera. Lo busqué hasta que al fin lo tuve frente a mi en la tienda de discos. Fue... mi primer cd.

El jueves fui a verlo, una vez más. Ya son siete los discos que ha sacado al mercado. Ha crecido. Sus letras son más ricas y la música está más llena de matices. No defrauda. No puedo negar que, a medida que más escucho sus Sueños de un hombre despierto, más me gustan. Pero cuando para cerrar, suenan los acordes de Papá cuéntame otra vez, me estremezco, mi mente vuela y vuelvo a aquella escalera...

12 comentarios:

Lolita Blahnik dijo...

Oh! hace tanto que no lo escucho... tengo que desempolvar sus cd! que ganas de volver a oirle

violetazul dijo...

Me gusta concocer la historia personal de este amor de cada una.. es curioso cómo la misma voz y las mismas letras, nos dan situaciones tan distintas.. Sin embargo los sentimientos son casi todos iguales, verdad?
Te fijaste en qué delgado está???
Besos guapa!

Maie dijo...

No lo conozco...hice un search en internet...Ismael Serrano? voy a ver si consigo algo para escucharlo...
Como sigues?

La Dama Zahorí dijo...

¿Dónde estarás...?
Niños de azul marino y corbata,
se despedirán de ti cada mañana...

Ajo dijo...

Me quedo con lo que me escribió en un autógrafo hará algunos años tras un concierto en la Sala Paraninfo...
"HOY ES SIEMPRE TODAVÍA"

Mi amiga es una gran fan de ella y la seguí a algunos conciertos jejej

Satautey dijo...

En mi orfenador tengo una nota en un post it desde hace ya algún tiempo y dice:
"No te lo pienses dos veces, haz lo que te pida el alma. Puede que cambie tu suerte, mira que eres canalla¡¡¡¡".
Se que no es de el, pero sólo cuando la cantó el fue cuando me llego dentro...

AnyGlo dijo...

Qué historia más linda!!!!!!!!!
Y en ella,Ismael!!!!!
Un placer leerte y escucharle!!!
Que sí, que me gusta escucharlo y no pongas esa cara de sorpresa... Que te conozco!!! Jajajajajaja

White&black fairy dijo...

jeje pss la verdad se me queda la espinita clavada de la promesa de que el próximo concierto al que iriamos juntas seria sentaditas y alguno elegido por ti pero no se si aguantaria porque la verdad no se de ningun concierto a la vista pero si me entero de alguno te aseguro que me informo jeje que haya concierto o no te va a tocar aguantar a la plasti unos dias jeje le cogi el gustito el año pasado asi que .....

besitos de gominola

Anónimo dijo...

la última vez que lo vi fue en la cubierta de leganés, en un concierto de esos que dejan huella, con un montón de artistas más en favor de una buena causa, en favor del hospital severo ochoa y del doctor montes...

aún no he escuchado sus nuevos sueños, pero cada día, cada día, se oye su voz en Madrid, en la facultad, en el metro... algo tendrá...

mil besos

Silvia F.Keros dijo...

No lo conozco pero ahora mismito voy en su busca.

Un abrazo.

Rosa Marrero dijo...

Ismael Serrano, Pedro Salinas...

Mari Triqui dijo...

Es un placer leerte, lo cuentas de tal manera que hasta yo escucho su voz... sin escuchar su canción... Hubo un tiempo en el que me gustó mucho... creo que va siendo hora de recuperarlo...
Un beso.